Psicoterapia de Grupos

El grupo ofrece una serie de ventajas que favorecen un proceso psicoterapéutico, siempre que un profesional experto sea capaz de lograr un clima grupal de encuentro y crecimiento.

El objetivo de la terapia de grupo es el cambio de la estructura psíquica de sus miembros, para favorecer el enriquecimiento personal y la adaptación al medio.

Este cambio se realiza en interacción con los otros e implica:

• Mayor autonomía y desarrollo de un proyecto personal.
• Menor rigidez y culpabilidad.
• Mayor capacidad reparatoria y mejor contacto con la realidad.
• Mayor tolerancia a la frustración, menor tendencia a la acción.
• Mayor aceptación de los límites y las pérdidas.

El trabajo del grupo se da en un clima de libre y espontánea manifestación de sus participantes (todos tienen derecho a la libertad absoluta de expresión) y de una neutralidad y tolerancia absoluta del psicoterapeuta. Escuchando lo que ocurre en el grupo, interpretará lo que está pasando en el mismo y en sus integrantes.

En un grupo terapéutico se van experimentando de forma repetida y cada vez más adaptada las emociones, ansiedades y conflictos de la vida de sus miembros. Se crea un espacio vital en el que es posible aprender de forma privilegiada nuevas formas de sentir, pensar y comunicarse. Además, el encuentro con otros, con sus diferencias y semejanzas, permite el encuentro con uno mismo.

La sensación con la que algunas personas llegan de que “lo que a mí me pasa no le ocurre a nadie más”, es rectificada en el trabajo grupal y en muchas ocasiones cambiada por otra sensación que tiene que ver con que uno es capaz de salir del círculo de la enfermedad, cuando puede ayudar a otros.